Qué tal amantes de las mezclas, la alquimia, la cultura de bar y la buena hospitalidad. Hoy hablaremos del “PUNCH” catalogado como el precursor del cocktail desde 1632.

Se dice que su nombre proviene de la palabra hindi pãč , que significa "cinco", tal vez en referencia a los ingredientes considerados como los originales: arrak (aguardiente de vino de palma), azúcar, limón, agua y té. Otro dato importante es que en ese tiempo no existía el hielo, por lo que los ponches se bebían a temperatura ambiente. Se cree que lo bebía el pirata Francis Drake, y se sabe que era un favorito de Charles Dickens.

Los maestros poncheros aprendieron nuevas técnicas para resaltar esta original mezcla india, sustituyendo el agua por leche, añadiendo claras de huevo adicionados con siropes y otros licores. Cambiaron el aguardiente por uno más glamorosos como champagne o vino. La cultura de la mezcla ya había iniciado sus primeros pasos en el terreno de las bebidas alcohólicas y muchas de las bases de la mixología actual ya se conocían alrededor de 1800. Pero el “Punch” nunca perdería su esencia: frutas naturales, frescura, y un nivel de alcohol de medio a bajo. Así fue como se abrió paso a la modernidad, para ser hoy protagonista de la noche más moderna. Con el paso del tiempo, el punch fue cambiando su forma y su lógica. Nació a base de vino o cognac, después adoptó al ron jamaiquino y nunca dejó de lado al gin británico. Pasó de ser servido en las exclusivas y famosas poncheras para adaptarse a la lógica de los bares y el consumo individual.

 La cultura del “Punch” se desarrolló principalmente los territorios de dominio ingleses, llegando también a Estados Unidos que apenas contaban con unas décadas de existencia. Fue precisamente en este país donde aparece publicada por primera vez la palabra “cocktail” asociada a la mezcla de ingredientes y, sobre todo, ahí tiene lugar un cambio muy importante para el desarrollo de la coctelería: los bartenders norteamericanos desarrollaron la habilidad de realizar sus “Punchs” directamente en un vaso.

La resurrección del punch es una evidencia del lado vintage de la coctelería, que se sumerge en la historia para recuperar los modos de beber de antaño. Disfrútalo en esta temporada navideña.